LA HISTORIA NEGRA DEL AUTO DE JAMES DEAN

La archiconocida frase que le atribuyen erróneamente (pues pertenece al guión del film Knock on Any Door), "Vive rápido, muere joven y deja un bonito cadáver", le viene como anillo al dedo: Dean murió a los 24 años al volante de su "Pequeño Bastardo", el nombre que le puso a su flamante Porsche Spyder 550 plateado. Más irónico incluso que esta repetidísima sentencia fue su último trabajo: un anuncio publicitario que advertía sobre los peligros de la velocidad.

Once personas murieron o sufrieron graves accidentes por haber tenido contacto con el auto del malogrado actor de Holywood. Además, incendios y desgracias inexplicables rondaron la existencia de la flecha plateada, dando paso a rumores que hablan de una verdadera maldición.

La maldición del Pequeño Bastardo

En la primavera de 1955, cuando James Dean filmaba “Gigante” bajo la dirección de George Stevens, compró un Porsche Spyder y lo bautizó como "The little bastard" -El pequeño bastardo-, desconocía por completo la seguidilla de infortunios y accidentes que aquel vehículo acarrearía. Poco tiempo después, el 30 de septiembre de ese mismo año, Dean estrelló su automóvil en Paso Robles y perdió la vida. Lo curioso es que días antes de su muerte hizo un anuncio publicitario en la que advertía a los jóvenes de conducir con prudencia. Su muerte abrió un capítulo lleno de misterios, dudas y conjeturas que ha hecho crecer, hasta hoy, el rumor de que en torno a su auto existe toda una maldición.

Las tragedias comenzaron en el mismo sitio del accidente cuando el conductor del camión que iba a trasladar el vehículo del fallecido actor, murió aplastado al tratar de subirlo al remolque.
El Spyder, luego, fue rematado en la suma de 2.500 dólares. Cuando el auto llegó al garaje donde sería reparado éste se deslizó misteriosamente fracturando las piernas a los dos mecánicos que lo descargaban.
El dueño del auto, entonces, aun cuando no creía en supersticiones, intuyó que algo extraño sucedía con el vehículo y prefirió venderlo en partes.
Pasó un poco más de un año, cuando en octubre de 1956, un doctor de Berverly Hills que se había adjudicado el motor, murió cuando estrenaba el auto al que le habían instalado la pieza.
Poco después, William Esrhird, quien se había hecho de la caja de cambio, si bien sobrevivió, tuvo un grave accidente porque el sistema se trabó bruscamente y sin explicación.
¿Qué pasó con el resto de las piezas? La ruedas, por ejemplo, fueron vendidas a un joven que una semana después se vio involucrado en otro accidente.Se comprobó, a posteriori, que éstas tenían un defecto que habrían causado la muerte de Dean. Luego, en una carrera de velocidad, en un extraño incidente otro joven trató de robar el manubrio del auto maldito y resulto con su brazo cortado.

Posteriormente, el dueño del auto, un tal George Barris, casi convencido de que el auto estaba embrujado, entregó lo que quedaba de él a la Policía de California, para usarlo como un ejemplo de imprudencias de tránsito. Antes de ser cedido a la autoridad, inexplicablemente el galpón donde se encontraba “el bastardo maldito” ardió en llamas, incendiando a todos los automóviles que se encontraban aparcados, menos al auto de Dean.
De ahí, el Spyder 550 fue trasladado a Sacramento para ser exhibido en una exposición. En ese lugar, se cayó enigmáticamente de la tarima aplastando a un adolescente y partiéndole su cadera. Más tarde, la feria continuaría en Oregon, donde el camión que lo llevaba chocó contra la fachada de una tienda; y en la cuidad de Salinas, donde otro camión transportador patinó en el pavimento y se estrelló, resultando su conductor muerto.
La huella de “El pequeño bastardo” finalmente se hace difusa, Algunos dicen que se perdió en 1958, cuando en una exposición de seguridad vehicular realizada en la ciudad de Miami, desapareció sin dejar rastro desde el remolque donde era transportado. Otros comentan que en 1959, el auto maldito se partió en once pedazos, mientras estaba apoyado en una sólida base de acero. Lo concreto es que se desconoce, desde entonces, cuál es la suerte de las personas que han osado conducirlo.
Aunque muchos atribuyen todos estos hechos a una simple coincidencia, lo cierto es que el número de muertos es real y da como para pensar en que algo extraño sucede. La guinda de esta ácida torta fue la suerte corrida por Wuetherich, el acompañante de James Dean en el momento de su muerte. En 1981, murió en un accidente automovilístico en Alemania, cuando conducía en la carretera.
Jamás se volvió a saber del Pequeño Bastardo de James Dean. ¿Coincidencias o intrigante maldición?

Una niñez marcada: John Lennon

"La vida es aquello que te va sucediendo mientras te empeñas en hacer otros planes"

Sin duda John Lennon siempre será considerado uno de los mejores músicos dentro de la historia del Rock. El legado que dejó con sus composiciones y su música perdurara en el tiempo. Una vida que estuvo llena de alegrías, tristezas y muchos logros, y que seguiría cosechando más triunfos, sino fuera por aquella fatídica tarde del 8 de diciembre de 1980 cuando un fanático le disparó a sangre fría, terminando así con los sueños de Lennon.
Su muerte no sólo acabó con el derecho de vivir que tiene un ser humano, sino que destruyó el corazón de sus miles de seguidores, que veían en él a una gran leyenda y sobre todo un gran ser humano.
Su infancia estuvo marcada por momentos trágicos y tristes, desde la separación de su padre, la irregularidad vida de su madre, la crianza que le dieron sus tíos, hasta la muerte de su propia madre. Todos estos hechos lo marcaron desde niño, haciéndole ser una persona rebelde y siempre paraba metiendo en líos. Al mismo tiempo iba desarrollando un gran talento por el arte y los dibujos, además de ser un asiduo lector, aunque muchas veces las lecturas que a él le gustaba no coincidían con las asignadas por sus profesores, él pensaba que ellos eran demasiados aburridos.

En su adolescencia iría descubriendo su amor por la música, una afición que no dejaría hasta los últimos días de su vida, una de sus mayores influencias sería el no menos conocido Elvis Presley. La primera vez que Lennon escuchó sus canciones, se quedó mudo, siempre pensó que Elvis era una cosa más importante que la propia religión.
Uno de los momentos cumbres dentro de la carrera musical de Lennon se dio cuando fundo e integró Los Beatles, el mejor grupo de Rock a nivel mundial. Él éxito y la fama que alcanzó esta banda en la década del 70, los convirtieron en una verdadera leyenda musical. Hasta la actualidad no ha existido un grupo musical que haya podido superarlos, y su música seguirá causando más seguidores, en diferentes generaciones.
Lennon siempre adoro a sus amigos, pero se sentía muchas veces incomodo con la fama que iban consiguiendo el grupo, para él esto era demasiado. Sin embargo él espíritu que tenía John, lo reflejaba cuando se preocupaba por los demás. Además tenía un sentido del humor muy particular y una manera particular de expresar sus ideas, mediante la música, él podía trasmitir su cólera y su sentido del absurdo a través de sus canciones.
Lennon sentía que no lograba trasmitir todo lo que él necesitaba decir, y lo describe en una de sus canciones, reflejando la pérdida de independencia, el aumento de inseguridad y la búsqueda de alguien que le muestre una nueva dirección.

El día que John conoció a Yoko Ono su vida daría un giro inesperado. Muchos han criticado la presencia negativa que tuvo ella en la vida de Lennon, sin embargo le proporcionó una influencia política, intelectual y pudo él llenar ese vació existencial que tanto necesitaba. Lennon se aleja del grupo y decide emprender junto a su nueva compañera su carrera de solista. Tiempo después Los Beatles serían historia, y John empezaría a hacer historia con sus canciones.
Lennon siempre se describió como un verdadero genio, tal vez esto podría ser tomado por algunos como egocéntrico, lo cierto es que desde niño siempre tuvo mucha seguridad y convicción de lo que quería de la vida.
Jhon Winston Lennon su verdadero nombre en honor al entonces primer ministro británico Winston Churchill, nació el 9 de octubre de 1940, en Liverpool. Sus padres Julia Stanley y Alfred Fredy Lennon un marinero mercante que se encontraba en alta mar cuando nació Jhon y que años más tardes desaparecería por completo de su vida.
Desde muy niño supo lo que puede significar el perder a un ser querido y como la soledad se convierte en parte de su crecimiento, al igual que Paul Mc Cartney sufrieron la muerte de sus respectivamente madres cuando eran adolescentes, pero en el caso de Jhon la herida fue mucho más traumática porque llegó a perder a su madre dos veces; la primera cuando Julia lo entregó a Jhon a su hermana Mimi para que lo criara, y la segunda cuando un coche atropello a Julia causándole la muerte instantáneamente, el pobre de John tenía sólo diecisiete años.

Pasó sus primeros años con su madre, pero Julia tenía una personalidad exuberante, era una amante de las diversiones y de la vida nocturna, se enredó con un camarero de hotel y llegó a tener dos niñas, Julia y Jacqueline.
Viendo como su matrimonio se había destruido, Julia decide terminarlo y le permite al padre de Jhon, Freddy que pase las vacaciones con su pequeño hijo, sin imaginar que esta sería la ultima vez que Jhon vería a su padre. Al ver que Freddy se había retrazado en devolver a su hijo, Julia decide buscarlo, terminando este encuentro en una discusión. Freddy le plantea un terrible dilema al pequeño escoger en quedarse con él o con su mamá, Jhon lloroso escoge a su papá y cuando su madre se marchaba el niño corrió tras ella, y le rogó que no lo dejará.
La irregularidad de su vida hizo que Julia terminara por entregarle a Jhon a su tía Mimi para que lo criara como si fuera su propio hijo. Mimi era una persona autoritaria y muy rígida, era la presencia maternal que Jhon necesitaba, y Julia se convirtió en la tía liberal, la que siempre podría acudir frente a cualquier problema, es por eso que su muerte marcó una dura cicatriz en el corazón de Jhon: “Fue lo peor que me ocurrió jamás, Habíamos recuperado muchas cosas, Julia y yo, en unos pocos, nos entendíamos, Era genial”. Años después él le dedicaría dos canciones en su honor: “Julia” y “Mother”

La infancia de Jhon fue muy difícil, empezaría a mostrar sus primeras actitudes de rebeldía y descubriría su interés por el dibujo y por los libros. Con un carácter fuerte, directo, no tenía pelos en la lengua, decía lo que pensaba, y siempre dominó su necesidad de dominar a los demás y ser el centro de atención, su inteligencia aguda lo ayudaba a sentirse en algunos momentos superior frente a sus compañeros de colegio. En la secundaria, conocería al que seconvertiría en su mejor amigo Peter Shotton. Siempre se metía en problemas, le gustaba hacerles bromas a sus profesores y era muy irrespetuoso con ellos.
Era un lector asiduo, leía desde Lewis Carroll, Edgard Allan Poe hasta Robert Louis Stevenson, desarrollando así su talento como escritor, sin embargo este tipo de lectura no era la que los maestros le pedían, y él sentía que ellos no sabían nada.

La leyenda de los Beatles y de su amor incondicional a Yoko, es otra historia; sin embargo me pareció más interesante resumir una etapa que lo marcaría después como hombre y músico; su infancia.

Frases:

“¿Por qué mi tía, mi estúpida tía Mimi, quiere que sea dentista o profesor? ¿Por qué sé c... en mis poemas? ¿Por qué no me manda a una escuela de arte? ¿Por qué esa bruta no se da cuenta que soy un genio?”
(John, a los 9 años)

“ En la escuela de arte yo era un borracho perdido. Cuando hicimos Help empecé con la marihuana y dejé la bebida, así sencillo. Siempre necesité de las drogas para sobrevivir

link: http://www.youtube.com/watch?v=efKbR1If3VQ